Si alguna vez quisiste sentirte como un detective sin salir de tu silla, La Habitación Blanca 5 es el reto que estabas esperando (o no, pero aquí estamos). Este juego de escape con estética de dibujo animado te pone en un cuarto donde la misión es clara: buscar objetos y usar tu coco para salir de la habitación. Fácil, ¿verdad? Bueno, no tanto cuando descubres que algunas pistas parecen puestas allí por un bromista profesional.
El truco está en el uso del ratón izquierdo para interactuar con todo lo que se ve. Eso sí, no esperes que todo sea agarrar y usar; aquí tienes que combinar objetos, pensar en qué hacen las cosas, y recordar esa clase de lógica que juraste olvidar. Es como jugar al CSI pero sin los CSI-glamour, más bien el CSI del barrio. ¿Encontraste un papel? Úsalo. ¿Un tornillo? Quizá te sirva para arreglar esa puerta que parece tener 500 años. Y no te confíes: cada objeto está ahí por una razón, y a veces pensar en lo obvio puede llevarte a un callejón sin salida.
Lo mejor de todo es que la jugabilidad es tan sencilla como hacer clic y esperar que el juego no te haga sufrir demasiado (spoiler: te hará sufrir, pero de forma divertida). La exploración del entorno es clave, y lo que parece un detalle sin importancia puede ser la clave para avanzar. A mí me pasó que intenté combinar cosas como si estuviera en un taller de manualidades y terminé con un batiburrillo digno de MasterChef, pero hey, parte del encanto es aprender de los errores.
En resumen, el núcleo del juego es usar la lógica para encontrar objetos escondidos y resolver puzzles que a veces te hacen rascarte la cabeza como si hubieras perdido las lentes. Así que, si te van los juegos que te hacen sentir listo aunque a ratos dudes de tu inteligencia, dale una oportunidad a La Habitación Blanca 5. ¿Lograrás salir antes de perder la paciencia? GG y buena suerte con eso.