¿Listo para un desafío que combina parkour, memes y ese caos absurdo que solo internet puede ofrecer? En Br Br Patapim: Obby Challenge, te lanzas como el legendario Brr Brr Patapim a un mundo donde saltar y caer no solo es inevitable, sino que también te sacará más de una sonrisa (y quizás algún ¿pero qué acabo de hacer?). El control es tan básico como tus ganas de reaccionar rápido: W, A, S, D para moverte, espacio para saltar, Shift para correr y el mouse para mirar alrededor. Fácil, ¿no? Ya, ya... hasta que te enfrentas a esos ridículos niveles plagados de trampas que parecen diseñadas por un grupo de gatos hiperactivos.
Lo que hace que este juego sea un meme-fest épico es su sistema de plataformas y trampas. No es solo saltar de punto A a B; aquí cada salto es un mini acertijo y cada caída un espectáculo. Piensa en eso como intentar sortear un pasillo lleno de pisos de LEGO mientras esquivas torrentes de memes que vuelan al azar. La física del salto tiene sus caprichos (en serio, a veces parezco hacer breakdance involuntario en el aire), y el timing es todo para no acabar de cabeza en alguna trampa loca. El nivel de caos es tan alto que es imposible no reírte cuando un salto aparentemente sencillo termina en un fail digno de compilación.
También está ese pequeño detalle del movimiento rápido y la cámara. Tienes que combinar correr con Shift y controlar la mirada con el mouse para evitar caer en trampas o perder el equilibrio (y tu dignidad). Al principio pensé que era un combo sencillo, hasta que me di cuenta de que moverme rápido en un escenario diseñado para hacerme tropezar es como bailar salsa en un barco en medio de una tormenta. Por supuesto, cada intento desesperado agrega ese toque de humor involuntario que hace que quieras intentarlo una y otra vez.
¿La mejor parte? La inspiración meme-tóxica al estilo italiano que pinta cada nivel con una personalidad tan estrafalaria que jamás sabes qué esperar. Así que, si alguna vez quisiste saber cómo sería correr un obby en un sueño hecho viral de TikTok, este juego es tu boleto. Prepárate para reír, frustrarte y, lo más importante, presumir tus caídas épicas. Y hey, si logras llegar lejos sin que tu teclado ruja de impotencia, GG para ti.